martes, 25 de agosto de 2015

Enciende tu Poder Personal: Cómo poner en marcha tu Propósito de Vida



Cada vida tiene un propósito, de hecho, tiene muchos propósitos. Todos los días cada uno de nosotros es motivado para hacer distintos tipos de cosas. Pero esto es diferente a una vida que es guiada por un único propósito. Acumular diferentes acciones durante el día no es lo mismo que conocer y llevar a cabo tu visión. Cuando encuentras una visión personal, los medios para llevarla a cabo surgen naturalmente. Una fuerte y clara visión ilumina tu propósito de vida.

Hay una motivación interna y una recompensa externa. Esta disputa entre el interior y el exterior es clave cuando se trata de encontrar tu propósito de vida. Antes de que cualquier propósito pueda ser puesto en marcha, una visión personal es lo primero que debes tener en cuenta. Cuanto más fuerte sea tu visión, más inspirado estarás, y la inspiración siempre es la motivación más grande.
 

¿Cómo encuentras tu visión personal, la cual será tu sostén durante toda tu vida? Para la mayoría de la gente esta pregunta es demasiado amplia y general. Una visión puede ser personal y satisfactoria sin ser grandiosa o definitiva. La prueba que cualquier visión debe superar es la prueba interna. Imagínate que persigues lo que desea tu corazón. Siente lo que sentirías en tu interior al hacer esto. Pon todos los detalles posibles en esta imagen mental. Una vez hecho este ejercicio, cuan motivado estás para dar el siguiente paso? Las visiones se expanden con los logros, y para darle vida es necesaria la retroalimentación en el mundo real.


Muchas personas se desalientan al perseguir su visión porque la ven demasiado lejos. Esto es pura imaginación. Una vez le preguntaron a un campeón mundial de ajedrez cuántos movimientos por delante podía ver. Él respondió: "Sólo uno, pero es el correcto." Esta norma es útil para la mayoría de la gente. Ver sólo un movimiento hacia el futuro, pero tomar decisión correcta. Debes darte espacio para cambiar de táctica y cometer errores, pero no te conformes con un movimiento que sientes que no es correcto. Una visión no se trata de alcanzar un objetivo. Se trata de la expansión, evolución y plenitud interior. No se puede llegar a plenitud si cada paso es desalentador, es difícil o es una lucha. Aquí me estoy refiero a la lucha interior. Cuando estás siguiendo tu propia luz, las dificultades externas se convierten en una parte gratificante del desafío. Ten en cuenta que cada paso debe ser un paso que deseas dar, no es un paso que sientes que debes dar.

-Deepak Chopra, M.D

martes, 18 de agosto de 2015

Siete Razones por las Cuales la Gente no te Escucha

“Una de las formas más sinceras de respeto es escuchar realmente lo que otro tiene que decir.” – Bryant H. McGill

Para ser eficiente en el trabajo o en tu casa, tienes que ser escuchado. Los niños adquieren su autoestima al ser tomados en serio, y esto implica, en primer lugar, prestar atención a lo que están diciendo. Como adultos, esa necesidad es casi igual de grande. Si no puedes mantener la atención de otra persona, no tendrán en cuenta tus opiniones y sugerencias - en el peor de los casos, no te tendrán en cuenta a ti.

Entonces, si que compruebas que no estás siendo escuchando, ¿cuál es la razón? Esto no es un juego de culpas. No es que estés haciendo algo mal o que la otra persona tenga la culpa. Lo que sucede es lo siguiente, hay un problema de comunicación, y la comunicación es una calle de dos vías. Con eso en mente, aquí hay siete razones por las cuales la gente no te está escuchando.

1. Perdiste su atención al comienzo. Tan simple como suena, es la razón número uno por la cual la gente deja de escuchar. Perdieron el punto desde el principio, por lo que se desconectaron.

2. Están distraídos. Algo más está reclamando su atención, mientras que tú estás tratando de conseguirla.

3. No están interesados, pero no encuentran una buena manera de decírtelo.

4. Se ven obligados a escuchar a tanta gente que responden de esta forma automáticamente.

5. Has cruzado una barrera emocional. La otra persona tiene creencias privadas que has invadido.

 6. Momento incorrecto. Has entrado en la situación en un momento en que la otra persona no está dispuesta a escuchar.

7. Estás esforzándote demasiado, poniendo presión en la otra persona. El estrés hace que todos dejen de escuchar.
Todas estas cosas pueden corregirse mirando y escuchando lo que realmente está sucediendo en una situación determinada. Aquí podemos lograr un único objetivo - conseguir que otra persona nos escuche - invirtiendo las cosas que les distraen.


Para ser realmente escuchado:

1. No sobrecargues tu argumento o posición. Redúcelo a un punto. Asegúrate de estar satisfecho solo con este punto, y exprésalo claramente, luego espera. Busca señales de que la otra persona te ha escuchado. Si observas que no te están siguiendo, detente y pregunta: "¿Qué te parece?".

De ninguna forma pierdas tu público al tratar de expresar tantos puntos que lograrán que pierdas su atención.

2. Elige un momento y un lugar en que la otra persona no se distraiga. A veces esto no es fácil, porque la vida de oficina bombardea a todos con distracciones constantes. Si puedes, debes concertar una cita o bien decir: "¿Cuándo es un buen momento?" No digas: "¿Es este un buen momento?" porque la mayoría de la gente dirá que si, por el simple hecho de ser amable. En estas circunstancias, no serás escuchado.

3. Hable con personas que estén interesadas. Tratar comunicarse sin previo aviso con alguien que no es receptivo sólo te desmoralizará. Incluso vas más allá de su indiferencia, se molestarán por esto. El mejor abordaje es preguntar si están interesados. Obtendrás algunos "no", pero al menos el intercambio será honesto. También, pregunta en privado para saber si alguien está interesado consultando a amigos y colegas.

4. Muchas personas ocupadas han aprendido a fingir que escuchan debido a la constante demanda de su tiempo. No te involucres con aquellos que no serán escuchados. En su lugar, acércate a alguien que en realidad es escuchado por esta persona, que te ayudará a que te tenga en cuenta. Para lograr que una determinada persona te escuche, primero debes llegar a la gente que esta persona ya escucha.

5. Siempre es complicado cuando sin querer cruzas los limites emocionales de tu oyente. Si ves que esto ha sucedido, pide disculpas y sal. No trates de compensarlo. No funcionará.

6. Si has llegado en un mal momento y no lo sabías, retírate inmediatamente. No digas: "Esto sólo tomará un segundo." La gente deja de escuchar cuando escucha eso. Solicita reprogramar después el encuentro, no en el acto.

7. No te esfuerces demasiado. Incluso si presionas con fuerza suficiente como para salirte con la tuya, saldrás resentido. Esto hará que luego de un rato dejen de escucharte. El secreto aquí es establecer una buena relación. Se agradable y sincero. Cualquiera puede decir que se siente a gusto, así que no hagas eso. Has establecido una buena relación cuando la otra persona sonríe, descruza sus brazos, sigue tu mirada, y se ve relajado.

Espero que estos puntos abran tus ojos que veas el valor de saber cómo llamar la atención de otras personas.

-Deepak Chopra



jueves, 13 de agosto de 2015

How to Get a Clear Mind - Cómo Obtener una Mente Clara



A veces las preguntas más grandes que usted puede hacerse son: ¿Quién soy? ¿Cuál es mi propósito? ¿Dónde puedo encontrar la plenitud? Estas pueden resumirse en una pregunta muy sencilla: ¿Qué voy a hacer hoy? Grandes visiones no son difíciles de imaginar, pero su realización es el problema. Todos nuestros dias están llenos de distracciones. Deberes y exigencias se acumulan constantemente. Los problemas más grandes se vuelven confusos cuando la lista de tareas pendientes nos desborda. Entonces, ¿cómo podemos unir la visión y el sentido de la prácticidad?

Las tradiciones de sabiduría del mundo nos dicen que hay que mirar dentro de los verdaderos obstáculos que bloquean el camino hacia la plenitud. Las exigencias siempre ocupan el tiempo que les damos, y darles lugar en nuestra vida cotidiana, inevitablemente, hace que nuestra existencia se sienta estresada y caótica. Lo que puede hacer en su lugar es examinar su realidad "aquí mismo", que es donde se puede encontrar la claridad.

Lo que la mayoría de la gente encuentra cuando mira en su interior son los siguientes ingredientes en su estructura mental:


Confusión - esto se manifiesta al no establecer prioridades claras, porque el camino por delante no se ve claro y decisivo.


Distracción - esto se manifiesta como un centenar de pequeñas cosas que atraen su atención hacia aquí y hacia allá.


Desorganización - esto se manifiesta como una falta de pensamiento ordenado que conduce a resultados productivos.


Echemos un vistazo a estas tres cosas en particular. Son parte de la gestión de la vida mental, que es una necesidad básica. Hay un espectro de problemas que varian de persona a persona. En cualquiera de los extremos se encuentran polos opuestos, el estrictamente controlado pensador altamente disciplinado, y el simple soñador. Hay un sinnúmero de variaciones sobre cómo usamos nuestras mentes. Pero si su objetivo es la claridad, deje a un lado los pensamientos y las sensaciones que llenan su mente todos los días. Debe centrarse en el objetivo de encontrar la claridad.


La confusión se resuelve al establecer sus prioridades.

La distracción se resuelve al mejorar en el modo en que enfoca su atención.

La desorganización se resuelve por deshacerce de cosas no esenciales y enfocandose en las cosas importantes en primer lugar.


Recuerde que estamos hablando sobre su vida interior, por lo que el logro de la claridad no es lo mismo que la limpieza de la casa y ordenar todas las habitaciones. La solución no consiste en atacar el problema directamente. Si usted se convirtió en una especie de experto en eficiencia, probablemente podría ordenar su pensamiento de una manera más adecuada, más enfocada. Pero el esfuerzo sería una agotador, y los resultados problablemente serian temporales. Sería mucho mejor es encontrar una manera de dejar que la mente se vuelva ordenada, centrada, y clara por sí misma.

A todos nos han enseñado, de una manera u otra, que la mente puede descontrolarse si no está vigilada y controlada. Como un niño que se distrae con facilidad; una mente indisciplinada se dispersará en todas las direcciones. Pero pocas personas han comprobado en realidad si la naturaleza de la mente es tan caótica. Damos por sentado, mirando nuestra propia confusión, que sería una lucha convertir el caos interno en algo más ordenado. Aquí es donde las tradiciones de sabiduría del mundo ofrecen un valioso secreto.

Ellos enseñan que la mente inquieta se produce a de una sola manera - perdiendo de vista lo que realmente somos. No se puede ser un títere de las exigencias y presiones externas a menos que se vea a sí mismo como secundario, mientras que el mundo "exterior" es primario. Después de todo, ¿cómo se puede comer, poner un techo sobre su cabeza, formar una familia, y así sucesivamente, sin sumergirse en las duras realidades de la vida cotidiana? La respuesta radica en saber quién eres en realidad - un agente consciente que puede elegir en cualquier momento vivir desde el nivel del verdadero yo.

Al comprometerse con la práctica de la meditación, usted lleva su mente a ese nivel donde la claridad es natural, sin esfuerzo. La analogía de un río ayuda a explicar lo que sucede. En la superficie de un río el flujo es rápido y turbulento, con ondas y remolinos. Al descender en el, sin embargo, el flujo del río se vuelve lento y constante, y en la parte inferior, el agua puede estar tan tranquila que casi no se mueve en absoluto. De la misma manera, hay un nivel de la mente que sólo conoce la paz, la calma y la claridad. Pero a diferencia de un fondo del río, no es lenta. Hay un hermoso equilibrio entre la relajación y el estado de alerta.

La mente calma, de hecho, es completamente capaz de responder a las demandas diarias, ya que es guiada desde el interior. La auto conciencia domina, lo que significa que usted sabe quién es y adónde va. De pronto resulta que el día contiene suficiente tiempo para que usted encuentre plenitud, que es una cualidad atemporal, sin ser molestado por las exigencias, obligaciones y distracciones.

La meditación diaria regular también conduce a cambios en su vida diaria que pueden resumirse en "Que hacer y que no hacer".